Este mes es un mes donde la ingesta de muchas calorías en pocas horas, hace que luego sea muy difícil de recuperar nuestra línea, así que de la mano de nuestra amiga nutricionista Sofia, les dejamos algunos consejos para sobrellevarlo:
Disfruta de los tuyos: es una época llena de magia, los paseos por el campo o la ciudad, algunas compras pensadas y mucha imaginación puede que cambien nuestra perspectiva de cómo disfrutar de estas fiestas.
Planificar las compras: comprar los alimentos que sean necesarios para el menú programado. Elegir por gusto y calidad y no dejarnos llevar por el impulso del consumo y querer llevarnos todo a casa. Si planificamos ahorraremos tiempo y dinero.
Preparar las comidas sin hambre: evitar el picoteo mientras se preparan los platos. Tener a mano agua, infusiones etc.
Antes de asistir a una celebración: comer un tentempié o refrigerio ligero evitará comer demás.
Llevar un plato preparado: para asegurarse una opción más saludable podemos ofrecernos a llevar algún plato.
No merodear por la comida: la corta distancia aumenta la tentación.
Servir en platos pequeños, nos ayudará a moderar el consumo.
La medida de las porciones: elegir en su mayoría verduras y completar con las proteínas y los hidratos de carbono. Evito repetir.
Postre: que sea el que más me guste y una porción razonable. Dentro de lo que se pueda elegir los mas naturales a base de frutas; sorbetes, macedonias, zumos, yogurt.
Controlar la sal y el exceso de grasas: evitar excesos de mayonesas, salsas y demás guarniciones con bases grasas. Una buena opción en el mercado son los productos bajos en calorías.
Condimentos: utilizar hierbas y especias aromáticas como el laurel, perejil, comino, tomillo, canela, curry, azafrán, albahaca, orégano, salvia, estragón, utilizar aliños caseros a base de ajo, cebolla, puerros, limón, vinagre.
Aperitivos: elegir los que posean de base frutas y verduras.
Moderar el consumo de alcohol. Antes de las comidas beber agua, y durante las comidas agua y refrescos bajas calorías, restringir el vino a una o dos copas y el champagne solo para el brindis.
Beber mucha agua: incluimos agua como tal, infusiones, sopas, caldos o zumos cítricos.
Intentar no caer en la compra de dulces navideños muy lejos de las fechas señaladas para no sucumbir ante su tentación.
Equilibrar las calorías en los días intermedios al 24 y 31: si los días previos y posteriores a estas fechas intentas controlar la ingesta calórica, podrás recuperarte fácilmente de los excesos (intentando que sean los mínimos) en los días posteriores.
Limita a los días señalados para darte un homenaje, escoge la comida que más te guste y disfrútala!
Qué hago con la comida que sobra? Se puede congelar o regalar, pero no utilizarla para comer en los días intermedios pues de ser así estaremos aumentando mucho el aporte calórico con la consiguiente consecuencia.
Al terminar de cenar: levantarse de la mesa. Dar un paseo, bailar o jugar con los niños nos ayudara a activar el metabolismo.
La clave es la moderación: comer con inteligencia, servirse una porción y saborearla despacio, masticar lentamente hará que comamos menos y mejore nuestra digestión.
Costará menos no pasarse, que pasarse y remediarlo. Seguramente supondrá un esfuerzo mucho más grande que la satisfacción que supuso el exceso, además del consabido sentimiento de culpa.
No dejemos que el exceso arruine nuestros esfuerzos por mantenernos en un peso saludable, lo mejor será comer de todo y con moderación.
Concentrarnos en disfrutar junto a los seres queridos y tener claro que divertirnos no solo tiene que pasar por la mesa.